Puertas que Chillan

Page 15

Cuando toqué la puerta nadie nos atendió, el miedo nos cubría como una manta calurosa. Comenzamos a escuchar a un hombre que gritaba por ayuda dentro de la casa, forcé la puerta y la golpee con el bate hasta poder entrar, la puerta tronó y en cuanto estuvo abierta vi como de la habitación salía un hombre alto y robusto con una cabeza de cerdo, sus ojos eran saltones y pandos, estaba empapado en la sangre de las pobres personas que vivían ahí, mi esposa al borde del colapso salió corriendo pidiendo ayuda en las calles, me quedé petrificado solo viendo a semejante criatura acercarse a mi con los ojos saltones mientras hacia como un cerdo hambriento,


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.