Estimada familia CPTED hispana, Les deseo estén muy bien, recuperándose algunos ya de la crisis inicial de COVID 19 y otros todavía en situación de cuarentena desde el hogar tomando extremas precauciones sanitarias. La situación planetaria producto del COVID 19 ha sido una de las más duras que la humanidad ha debido atravesar en los últimos siglos y ha dejado sin duda huellas imborrables en las diversas comunidades en el mundo. Esta experiencia dolorosa y de cambios vertiginosos también ha puesto sobre el tapete nuevos focos en temas que antes de la crisis estaban presentes pero que posterior a ella han tomado una extrema relevancia. Uno de estos aspectos es el de la salud mental que es parte de los principios fundamentales de CPTED de tercera generación. Cabe recordar que la metodología CPTED es una metodología viva que va evolucionando de la mano de la evolución social. A inicios de la década del 70 el criminólogo C. Ray Jeffery acuña el término CPTED (Crime Prevention Through Environmental Design) describiendo los cuatro principios básicos de la metodología que son: vigilancia natural, control natural de accesos, reforzamiento territorial y mantenimiento. CPTED de primera generación tiene como objetivo la reducción del delito de oportunidad y percepción de inseguridad.
INDICE Luego ya en el año 2000 empieza a acuñarse CPTED de segunda generación incorporándose la dimensión social a la metodología con el quinto principio de participación comunitaria. CPTED de segunda generación tiene como objetivo la calidad de vida. A fines del año 2019 se inicia la tercera generación de CPTED que agrega tres principios más a los cinco anteriores que son: sustentabilidad, autorrealización y salud pública teniendo como objetivo la habitabilidad. Es en este último principio de salud pública que la salud mental cobra una relevancia clave y en especial en el contexto de la pandemia que estamos atravesando.
Carta Presidencia ICA
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Equipo Región LAC
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Próximos Eeventos
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Tengo Voz: ¿cómo sueñas Tu ciudad?
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Acciones para atender la salud mental en tiempos de COVID-19
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Cpted y Salud Mental
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En las diversas comunidades del mundo y en nuestra región hispana hemos observado como los factores estresantes ambientales han gatillado depresión, angustia, fobias, rabia, agresividad entre otras patologías en los diversos grupos etáreos. CPTED de tercera generación ofrece herramientas muy apropiadas para abordar estas emociones displacenteras y patologías en conjunto con otros tratamientos focalizados para lograr mayor armonía ambiental y habitabilidad. Como equipo ICA LAC esperamos aportar con este volumen especial del Newsletter con el foco puesto en la salud mental desde la óptica de CPTED de tercera generación. Saludos cordiales, Macarena
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EQUIPO ICA REGIÓN LATINOAMERICANA Y DEL CARIBE
Maca ena Ra Va ga P e iden e In e na i nal CPTED A e iden c ed ne
cia i n
Ma eja Mihinjac E ec i e Di ec In e na i nal CPTED A cia i n Ma eja Mihinjac c ed ne
Ca l G ié e Ve a Di ec ICA Elec ed ca l g ie e c ed ne
NE
LE E
FICIAL ICA LAC
Me cede E c de Ca m na Di ec ICA Regi nal A in ed me cede e c de c ed ne
ÁGI
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PRÓXIMOS EVENTOS
21 de agosto
20 de agosto
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PRÓXIMOS EVENTOS
21 de agosto
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PRÓXIMOS EVENTOS
28 de agosto inicia
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@MacarenaRau
Macaena Rau
@CptedL
Corporación CPTED Región Latinoamérica
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TENGO VOZ, ¿CÓMO SUEÑAS TU CIUDAD?: SALUD MENTAL Y EMOCIONAL DESDE LA ÓPTICA DE CPTED DE TERCERA GENERACIÓN Autora: Macarena Paz Rau Vargas Presidente International CPTED Association
1.
INTRODUCCIÓN
El mundo esta cambiando de forma acelerada y vertiginosa. Esta situación de cambio ambiental nos está situando en un cambio de paradigmas sin precedentes. De acuerdo al Dr. Otto Sharmer del MIT, como humanidad nos estamos desplazando de un EGO-sistema a un ECO-sistema. En este tránsito el ser humano debiera al menos formularse las siguientes preguntas: 1. 2. 3.
¿Cuál es mi relación con la naturaleza? ¿Cuál es mi relación con la sociedad? ¿Cuál es mi relación conmigo mismo?
La metodología CPTED en el marco de este cambio de paradigma global es de mucha utilidad y pertinencia ya que al ser una metodología viva ha ido evolucionando junto con la sociedad. A inicios de la década del 70 el criminólogo C. Ray Jeffery acuña el término CPTED (Crime Prevention Through Environmental Design) describiendo los cuatro principios básicos de la metodología que son: vigilancia natural, control natural de accesos, reforzamiento territorial y mantenimiento. CPTED de primera generación tiene como objetivo la reducción del delito de oportunidad y percepción de inseguridad. Luego ya en el año 2000 empieza a acuñarse CPTED de segunda generación incorporándose la dimensión social a la metodología con el quinto principio de participación comunitaria. CPTED de segunda generación tiene como objetivo la calidad de vida. A fines del año 2019 se inicia la tercera generación de CPTED que agrega tres principios más a los cinco anteriores que son: sustentabilidad, autorrealización y salud pública teniendo como objetivo la habitabilidad. Es en este último principio de salud pública que la salud mental cobra una relevancia clave y en especial en el contexto de la pandemia que estamos atravesando. En las diversas comunidades del mundo y en nuestra región hispana hemos observado como los factores estresantes ambientales han gatillado depresión, angustia, fobias, rabia, agresividad entre otras patologías en los diversos grupos etáreos. CPTED de tercera generación ofrece herramientas muy apropiadas para abordar estas emociones displacenteras y patologías en conjunto con otros tratamientos focalizados para lograr mayor armonía ambiental y habitabilidad. 7
Sin duda que uno de los espacios que ha sido clave para la contención emocional en contexto de pandemia ha sido la escuela, que además ha sido reconvertida a un formato digital en diversas partes del mundo. La comunidad escolar, así como otras comunidades ha debido sortear diversos factores estresantes en el proceso, familias con enfermos COVID, precariedad económica, acostumbrar a niños a llevar una rutina escolar en casa, dotar de tecnología apropiada a los niños etc. Una de las herramientas CPTED que ha sido utilizada con éxito durante esta pandemia en el marco de la comunidad escolar y en pos de preservar la salud y armonía mental y emocional de los estudiantes a sido la Nube de los Sueños, pero en su versión digital. En este sentido quiero presentar un caso que ha sido de mucha relevancia y es la Nube de los Sueños basada en la metodología CPTED en el colegio The Grange School en Chile. 2.CASO DE ESTUDIO: NUBE DE LOS SUEÑOS EN THE GRANGE SCHOOL, Santiago (Chile), 2020 La pandemia COVID 19 llegó a Chile a fines del mes de febrero de 2020. En el mes de marzo los niñ@s del país entraron a clases en su nuevo año escolar. Ya a fines de marzo entró en vigencia la “cuarentena” y comenzaron las clases virtuales. Algunos colegios estaban más preparados que otros para este cambio digital y los niñ@s así como sus familias debieron adaptarse abruptamente en la marcha.
Esta exigencia de adaptación requirió de mucha energía y produjo al poco andar diversas situaciones emocionales como estrés, cansancio, depresión, angustia, entre otras en las diversas comunidades escolares sumadas a todos los estresores ambientales propias de la situación de catástrofe nacional decretada por el gobierno. En este escenario de alta exigencia emocional los profesores han sido una figura clave junto a las familias para contener a los niñ@s en el marco de la comunidad escolar. Hay profesores que han logrado adaptarse a los cambios con dificultad; pero hay otros profesores que han demostrado una gran flexibilidad y creatividad para adaptarse a los cambios y sacar cosas positivas de ellos en pos del proceso de aprendizaje socio emocional de sus estudiantes. Este es el caso de Mr. Alberto Contreras, profesor jefe de 6 D del colegio The Grange School en el año 2020. Mr. Alberto Contreras, al conocer la iniciativa internacional de la Nube de los Sueños de CPTED de ICA, tomó la iniciativa para implementarla y adaptarla a su curso. Es de esa forma qué mostrando un gran liderazgo como agente de cambio ambiental, Mr. Alberto Contreras junto con otros profesores del colegio ideó la iniciativa “Tengo voz, ¿cómo sueñas tu ciudad?”.
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Los profesores que apoyaron esta iniciativa son: 1. Carolina Véliz Q. 2. Nelson Véliz Q. 3. Macarena Droppelmann 4. Francisca Morales 5. Camila Cantillana 6. Alberto Contreras
Foto 1. Imagen de portada de la Iniciativa Tengo voz: ¿Cómo sueñas tu ciudad?
Para llevarla a cabo el investigó en internet sobre la metodología CPTED, sus principios fundamentales, sus orígenes y expansión en la américa hispana. Además, informó a la Directiva del Colegio para recibir aprobación para la realización de la actividad contando con el apoyo de Mr. Nicholas Murphy entre otros directivos. También accedió a los Manuales de la Nube y del Análisis de los dibujos que pueden descargarse en este link y que ya han sido compartidos e implementados por UNICEF a nivel global (https://www.dropbox.com/s/8j45ecxs0j29zfp/ANALISIS%20NUBE%20DE%20LOS% 20SUE%C3%91OS.pdf?dl=0) que le compartió Corporación CPTED Región (www.cpted-region.org) Una vez Mr. Alberto reunió toda la información desarrolló junto al resto del equipo docente del colegio The Grange School videos tutoriales que le dieron las instrucciones a los alumnos de cómo desarrollar su Ciudad Soñada.
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Foto 2. Video Tutorial donde Mr. Alberto Contreras, profesor del 6D del Colegio The Grange School, introduce la actividad de la Nube de los Sueños on line (https://youtu.be/b_Al8Lz3j6E ) Luego del video tutorial de Mr. Alberto, Miss Carolina, parte del equipo docente subió otro video tutorial dando instrucciones y guías a los niñ@s de cómo generar su propio video en casa exponiendo su sueño.
Foto 3. Video Tutorial de Miss Camila Cantillana para dar instrucciones a los niños de cómo subir sus sueños a plataforma Google Drive (https://youtu.be/9miuSgDbn5I)
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Como resultado de esta iniciativa de la Nube de los Sueños escolar en contexto de pandemia se obtuvieron diversos resultados muy positivos. El primero es que se creó conciencia en los niñ@s que la situación del COVID afecta a todos los niños del mundo, de la región hispana y en especial a los grupos más desiguales.
Luego se educó en los pensamientos de Jane Jacob´s, pionera del movimiento CPTED en la década del 60, respecto a cómo lograr ciudades seguras.
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Luego se invitó a soñar a los niños del 6D activando así uno de los mecanismos más positivos para lograr la resiliencia ambiental que es el mecanismo de poner la atención en la esperanza.
Foto 3. Sueño de Vicente Balbontín R., alumno 6D en The Grange School
Luego se obtuvo una excelente muestra de sueños plasmados en dibujos que permitieron a los profesores conocer el estado emocional de los niños de 6 básico. En el análisis de los dibujos se pudo constatar que a pesar de tener algunos niños cuadros de ansiedad bastante esperables en este escenario de pandemia, estos se encontraban muy contenidos no solo por sus padres, sino que también por el colegio. 12
Finalmente se logró información muy detallada y valiosa de los sueños que permitirán cambios ambientales y de formación curricular no sólo en el colegio sino que también en el entorno en el que se desenvuelve la comunidad escolar del colegio The Grange School en Santiago de Chile.
3.CONCLUSIONES CPTED de tercera generación llega en el mejor momento posible dado el escenario global disruptivo de la Pandemia COVID 19. El enfoque de la salud mental como parte del objetivo de ciudades y barrios más habitables es fundamental y diversas iniciativas a nivel comunitario y escolar son muy bienvenidas considerando no sólo la Nube de los Sueños, como es el caso de The Grange School en Santiago de Chile, sino que también el de muchas escuelas en el mundo que a modo de ejemplo enseñan “mindfulness” y meditación en sus mallas curriculares y que en estos momentos de cambio y estrés ambiental han sido de mucha utilidad. En los años venideros habrá mucha necesidad de implementar CPTED de tercera generación y esperamos contar prontamente con evidencia científica que permita demostrar sus relevancia y pertinencia para el logro de ciudades mas seguras, sustentables y habitables.
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CPTED México
@MercyEscudero
@cptedmexico
Mercedes Escudero
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ACCIONES PARA ATENDER LA SALUD MENTAL EN TIEMPOS DE COVID-19 Por Dra. H.C. Mercedes Escudero Carmona Directora Regional para Latinoamérica de la International CPTED Association y Presidente de CPTED México El impacto en salud mental y emocional provocado por la pandemia del SarsCov-2, conocido también como COVID-19 por el síndrome respiratorio que produce y, simplemente como Coronavirus, apareciendo en nuestras vidas con su violenta virulencia, no ha hecho más que provocar daño físico, psicológico, social y económico. Tanto ha condicionado los acontecimientos provocado temor, miedo e incertidumbre, ya que la vida de las personas está amenazada ante la alta posibilidad de contagio limitando nuestras libertades, y poniendo en peligro muchas otras teniendo como resultado la muerte. Además pareciera que ninguna de nuestras preguntas encuentra una respuesta adecuada, es decir, suficientemente explicativa y al menos tranquilizadora de lo que acontece. Por ello, las personas no se sienten seguras, ya que los recursos y servicios locales se ven amenazados porque su funcionamiento cotidiano cambia.
Otras personas también han buscado soluciones alternativas que les proporcionen alguna seguridad que les resulta preventiva, basada en creencias de la utilidad de medicamentos o remedios milagrosos o caseros con poca o nula validez científica sobre su eficacia que termina por exponerlos aún más al peligro de enfermarse, amontonando los sucesos relacionados en un pandemónium caótico. Esto es debido al sistema inmunológico de conducta (nombrado así por Sheller) que funciona con una lógica de “más vale prevenir que curar”. Esto significa que las respuestas a menudo están fuera de lugar y pueden ser desencadenadas por información irrelevante, alterando nuestra toma de decisiones. Además de convertirnos en jueces más estrictos entre las personas dentro de nuestro grupo social, la amenaza de enfermedad también puede hacernos desconfiar más de los extraños y en general cambios en las actitudes y estructuras sociales. 15
Y Como suele suceder en cualquier otro evento adverso, todo esto conlleva tragedias en la vida de las personas y es necesario atender la salud mental por las consecuencias psicológicas que se presentan. Desde esta perspectiva una epidemia de tal magnitud implica una perturbación biopsicosocial que puede superar la capacidad de manejo individual y/o colectivo de la población afectada. Es importante señalar que no todos los problemas emocionales y/o psicológicos que se presentan pueden ser considerados como enfermedades o psicopatologías; la mayoría son reacciones ante una situación fuera de lo normal como lo es que la amenaza de una enfermedad ocupe gran parte de nuestro pensamiento como sucede en estos días. Los efectos inmediatos en la salud mental, generalmente son relacionados al aumento de ansiedad, pero el sentimiento constante de amenaza puede tener otros efectos más traicioneros a nuestra psicología. Debido a algunas respuestas a las enfermedades que fueron evolucionando con los siglos, el miedo al contagio nos lleva a ser más conformistas y primitivos y menos receptivos a las conductas adecuadas. Nuestros juicios morales y actitudes sociales más conservadoras se vuelven más estrictas y los recordatorios diarios de la enfermedad pueden incluso influir en nuestras afiliaciones políticas. Los recientes informes de aumento de xenofobia y racismo pueden ser el primer signo de esto, pero si las predicciones de la investigación científica son correctas, pueden incluso reflejar cambios sociales y psicológicos mucho más profundos.
Estar enfermo/a o protegerse de una enfermedad contagiosa, también es costoso no sólo económica sino fisiológicamente y pueden tener consecuencias más marcadas en las poblaciones vulnerables con escasos recursos económicos y que tienen limitado y/o no cuentan con acceso a los servicios sociales y de salud. Aunque de forma individual muchas personas pueden enfrentar diversas crisis y pueden ser resilientes, pero en ocasiones puede verse rebasada su capacidad emocional de respuesta; es decir, sus mecanismos de defensa para afrontar las situaciones pueden resultar insuficientes y se presenta un desequilibrio e inadaptación psicológica y por ende social. Actualmente, todos sufrimos tensiones y angustias en mayor o menor medida, lo que genera el incremento de trastornos psicológicos y eleva el grado de vulnerabilidad de las personas de forma individual; así como de manera comunitaria. En las acciones emprendidas por los gobiernos no se ha contemplado del todo la prevención y atención a la salud mental y emocional de las personas, considerando su entorno.
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En México, según la encuesta de Consulta Mitofsky sobre Los Miedos de la Nueva Realidad de julio 2020, reporta que los miedos que tienen las personas y predominan como Muy Alto y Alto es por asistir a los espacios donde se concentran mayor número de personas, entre las que destacan: Miedo Muy Alto Asistir a un servicio religioso con más de 500 personas
97.5%
Ir a un concierto
94.3%
Ir a un bar
94.1%
Ir a un estadio deportivo
92.9%
Asistir a un funeral
92.3%
Asistir a una boda o fiesta similar
92.2%
Mandar a los niños a la escuela o guardería
91.5%
Caminar por un bullicioso centro de la ciudad
91.1%
Ir a un parque de diversiones
90.8%
Ir al cine
90.1%
Fuente: Consulta Mitofsky
Miedo Alto Comer en un buffet
89.2%
Hacer ejercicio en un gimnasio
88.5%
Visitar a un amigo o familiar de la tercera edad en su casa
87%
Abrazar o estrechar la mano de un amigo
86.4%
Nadar en una alberca pública
85.6%
Viajar en avión
84.7%
Trabajar una semana en un edificio de oficinas
84.6%
Estar sentado en la sala de espera de un consultorio
84.4%
Comer en un restaurante en interiores
83.8%
Hacer compras en un centro comercial
82.9%
Fuente: Consulta Mitofsky
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Por otra parte, el impacto en los familiares que sobreviven a personas que han muerto a causa del COVID-19 enfrentan el manejo del duelo y diferentes pérdidas. Las expresiones psicológicas más comunes del duelo son: recuerdos reiterativos de la forma en cómo murió la persona; tristeza, llanto, miedo, deseos de morir, nerviosismo, problemas de insomnio; pérdida de apetito, problemas de memoria, concentración, cansancio, dificultades para realizar las acciones cotidianas y regresar a la normalidad; tendencia al aislamiento, sentimientos o emociones encontradas, entre las que destacan: la frustración, impotencia, enojo; se hace presente el descuido del aspecto e higiene personal. Sin embargo, en condiciones como las que hoy vivimos por la pandemia, el duelo también significa enfrentar otras pérdidas, como: • El no poder tener contacto por última vez con su ser querido. • La suspensión y/o anulación de un proyecto de vida, que no solo afecta en el ámbito familiar, sino también en los ámbitos social y económico.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) desde el año 2002, señaló que en situaciones de epidemias y muertes masivas los miedos y sentimientos que experimentan los sobrevivientes1, son: •
Pesadumbre y aflicción por la perdida de familiares y amigos, que en ocasiones coexisten con pérdidas de tipo material. También existen perdidas más sutiles y a veces intangibles, como la pérdida de la fe en Dios, pérdida del sentido de la vida, etc. Miedos prácticos: los temores a asumir los nuevos roles que le impone la desaparición de un miembro de la familia (la esposa viuda que se convierte en jefa del hogar o el padre viudo a cargo de los hijos). Miedos recurrentes, a que pueda ocurrir algo nuevamente o que la muerte se va a cernir sobre otros miembros de la familia o la comunidad. Miedo personal a morir: el miedo a lo desconocido. Sentimientos de soledad y abandono: es frecuente que los sobrevivientes experimenten que los familiares y amigos los abandonan en momentos difíciles. Miedo a olvidar o ser olvidado. Enojo: se sienten molestos contra los que los murieron y lo descargan contra familiares o amigos cercanos. Sentimientos de culpa: se sienten culpables, en alguna medida, de la muerte de seres queridos y por haber sobrevivido. En ocasiones, cosas sucedidas después de la muerte incrementan este sentimiento. Vergüenza después de la muerte de un ser querido, por circunstancias que rodearon el fallecimiento de la persona (su comportamiento, humillaciones, etc.). O vergüenza por las condiciones en que queda la familia después de los sucesos.
•
•
• •
• • •
•
OPS/OMS. Manejo de cadáveres en situaciones de desastres y emergencias. Publicado por la OPS/OMS. Washington DC, 2002. 1.
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El Secretario General de la ONU, Antònio Guterres, señaló en días pasados que: “los problemas de salud mental a nivel global ya eran graves antes de la pandemia: 265 millones de personas sufren depresión, el suicidio es la segunda causa de muerte entre los 15 y los 29 años, las personas con problemas mentales viven en promedio 15 años menos que la población general, 3 de cada 4 enfermos mentales no tienen acceso al tratamiento eficaz que requieren y sus derechos humanos son violentados con frecuencia. Todo ello, me temo, podría empeorar después de la pandemia. Existe una comorbilidad bien documentada entre trastornos mentales y otras enfermedades infecciosas como la tuberculosis y el VIH/SIDA, entonces no veo por qué no ocurra lo mismo con el COVID-19. Según las primeras encuestas disponibles, entre el 35% y el 60% de la población en general experimenta algún síntoma en su esfera mental, emocional o conductual relacionado con la pandemia.” Desde la perspectiva de la Metodología CPTED de Tercera Generación se hace indispensable que los planes de salud mental no se limiten solamente a mejorar los servicios especializados a los que la minoría de la población tiene acceso, sino que sean más accesibles, para poder atender más problemas y necesidades psicosociales de la población en general, con una visión preventiva en pro de la salud mental pública de cada barrio o colonia.
Para lograr atender las necesidades humanas, se requiere de una estrategia de comunicación para que las personas mantengan la calma y tengan un estado emocional apropiado; ya que una población bien informada puede actuar de mejor manera para protegerse desde lo individual y a los integrantes de la comunidad donde viven e interactúan y ser menos vulnerables en el orden psicosocial, ya que el objetivo deber ser: crear confianza entre la población y las autoridades. Para que esta confianza se pueda desarrollar y consolidar, proponemos que: •
El plan de atención debe ser amplio y considerar el contexto cultural e ideológico de las personas.
•
Se definan metas que sean alcanzables de carácter preventivo.
•
Cada comunidad defina sus acciones a realizar a corto, mediano y largo plazo
•
Se realice una evaluación de las necesidades psicosociales y de las situaciones más vulnerables, para diseñar, desarrollar e implementar protocolos de actuación.
•
Las autoridades escuchen las demandas de la gente en sus propios espacios, colonia, barrio y/o comunidad.
•
Las autoridades trabajen para crear barrios, colonias y ambientes seguros, con la participación de la comunidad de cada territorio.
•
Se reinicien con protocolos de seguridad sanitaria, las actividades cotidianas de la comunidad, incluyendo el retorno a las actividades escolares, deportivas y recreativas.
•
Se diseñen y se creen espacios de apoyo mutuo en la colonia, barrio y/o comunidad para: expresión, comprensión, socialización y canalización para servicios especializados, si así se requiere.
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El apoyo emocional debe ser considerado como un pilar para la realización de las actividades diarias en las colonias, barrios y/o comunidades y formar parte de la satisfacción de las necesidades esenciales de la población para consolidar una salud mental colectiva.
Bibliografía “The intelligence Trap” – David Robson Investigación: “The Behavioural immune system and the psychology of human society” – Mark Shaller. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3189350/
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Carlos Alfredo GutiĂŠrrez Vera
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CPTED Y SALUD MENTAL. Arq. Carlos A Gutiérrez-Vera Bairon es un niño de 7 años que vive con su mamá y hermanas en una colonia de Tegucigalpa en Honduras. Ha estado confinado en su casa desde mediados de marzo como consecuencia de la pandemia COVID-19 y constantemente le pregunta a su mama “Cuando vamos a ir al Mall mami me siento mal aquí”. El encierro y la falta de contacto con otros niños comienzan a afectarlo emocionalmente. Sus ganas de salir y regresar a su vida normal se manifiestan en constantes pedidos para ir al Mall y en actitudes de enojo y malestar. Alejandro es un alto ejecutivo de una empresa en Argentina, el largo período de encierro le está causando constantes ataques de pánico, falta de sueño, y sus relaciones personales a nivel familiar se están viendo afectadas con constantes discusiones con su esposa e hijos, lo cual ciertamente está causando daño a todos los integrantes de la familia. En el marco de la pandemia COVID-19 muchas personas en todo el mundo se están viendo afectadas en su calidad de vida, producto de reacciones a nivel psicológico y emocional. El largo confinamiento en espacios pequeños, el temor al futuro, la incertidumbre, la falta de recursos económicos, están causando una serie de reacciones encadenadas que están afectando seriamente la salud emocional, física y social de las personas. Discusiones, ataques de ira, ataques de pánico, insomnio, mal humor, falta de apetito o comer en exceso son algunas manifestaciones que nos señalan que podemos estar perdiendo la salud mental.
Foto PIXABAY
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Y que entendemos mental.?
por
salud
Según la OMS, la Organización Mundial de la Salud define la salud mental como: “Un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad”. Aun cuando no hay solo una definición única sobre que es salud mental, diremos también de forma más simple, que, Es la adecuada capacidad que se tiene desde la mente, para afrontar de manera eficiente los desafíos de la vida cotidiana, dando respuestas efectivas y sin que dichas respuestas rompan la sana armonía de las relaciones sociales, como tampoco afectan la salud física de la persona. Es entonces, un estado de equilibrio de una persona entre ella y su entorno socio-cultural que garantiza su adecuada participación en ámbitos como el laboral, intelectual y de relaciones sociales que lo acercan a un estado de bienestar y calidad de vida.
En este sentido las emociones, la identificación de ellas y su adecuado manejo juegan un rol fundamental en el logro de una vida plena y saludable para una persona. Reconocemos 5 emociones básicas. La sorpresa, la ira, el miedo, la alegría y el asco. Las emociones están asociadas a reacciones físicas en el cuerpo y son espontaneas. Se producen de manera automática como respuesta a algún estimulo del ambiente. Las emociones son mecanismos automáticos que nos protegen ante estímulos del medio ambiente externo. Sin embargo, si no aprendemos a reconocerlas y manejarlas pueden volverse en nuestra contra. Por ejemplo. El miedo es un mecanismo de alerta sobre alguna amenaza que pone en riesgo nuestra integridad física e incluso la vida. Sin embargo si ese miedo se transforma en algo permanente y se basa en percepciones erróneas de los mensajes del medio externo, puede volverse en nuestra contra e incluso causarnos enfermedades. Toda emoción tiene una reacción biológica en el cuerpo. Se liberan químicos que contribuyen a preparar la estructura biológica para dar respuesta al estímulo percibido.
Foto PIXABAY 23
Así, el miedo produce importantes niveles de adrenalina. La posibilidad, imaginada o real, de que algo malo nos pueda suceder libera una secuencia de producción química desde el cerebro. Desde el hipotálamo en el cerebro las señales de alarma llegan a todo el cuerpo gracias al neurotransmisor llamado glutamato. La médula suprarrenal produce grandes cantidades de adrenalina -la hormona del estrés-, el nivel de azúcar en sangre se incrementa, el corazón late más rápido y las palmas de las manos empiezan a sudar. Esta respuesta prepara al cuerpo para enfrentar un peligro, peleando o corriendo. Ya a mediados de 1950, el fisiólogo y médico austrohúngaro canadiense, Hans Selye, estudio los efectos del estrés y sus orígenes en los factores psico emocionales. Se establece entonces la importancia de dichos factores y su relación con una serie de enfermedades físicas. Si este proceso de estrés es recurrente y estos químicos inundan el cuerpo de manera constante, poco a poco comienzan a producir daño y puede verse traducido en enfermedades de distinto tipo. Esto es lo que se conocemos comúnmente como “Estar afectado por el Estrés” que nos ha preparado para “Pelear o correr” frente a una amenaza. La emoción del miedo es entonces el desencadenante de todo un proceso de tipo bioquímico que ha sido programado en nuestro cerebro para protegernos frente a amenazas. Pelear o correr son las dos únicas vías.
Por el contrario otra emoción como la alegría, produce igualmente una reacción química de modo automático, pero con una descarga química completamente distinta. Una emoción como la alegría, y acciones como escuchar música, tocar un instrumento, bailar, hacer deporte, generan descargas de hormonas como serotonina, dopamina, oxitócina, las que están asociadas a bienestar y salud tanto física como emocional. Como podemos ver, si logramos aprender a manejar estos procesos que se producen a nivel mental, y con implicancias biológicas, podemos también aportar a la salud física, y a las buenas relaciones sociales. El resentimiento, la ira, la frustración, por ejemplo son construcciones mentales que pueden dar origen a acciones violentas cuando estas son gatilladas por algún estímulo. y no se tiene las herramientas psicológicas para manejar dichos estímulos. Es por tanto un factor relevante poder aprender a reconocer y manejar las emociones. Al no ser adecuadamente manejadas estas, potencialmente, se pueden manifestar en actos violentos contra otros o contra si mismo. Los miembros de comunidades afectadas por la violencia, migración forzada, violencia intrafamiliar y doméstica, pobreza, entre otros factores de riesgo, están constantemente expuesto a estos altos niveles de estrés y miedo. Muy fuertemente afecta esto a los niños que desde temprana edad se ven afectados por tales estímulos.
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Una rama de la psicología llamada Estudios de Proyecto Sentido determina que la impronta de un niño, vale decir el paquete de información primario que formará la base para su futuro desempeño psicológico y conductual, se ve influenciado incluso desde 6 meses antes de la concepción del bebe. Todos los cambios de tipo químico y hormonal que vive la madre, producto de su medio ambiente y experiencias antes de la concepción del bebe, dejan una marca biológica en su cuerpo, que luego es transferida durante la concepción, luego viene la información recibida del ambiente durante el proceso de gestación, y finalmente los estímulos que el niño tiene durante los primeros 5 o 6 años de vida. Por tanto, el ambiente en que un niño es concebido y criado toman cada vez más y más relevancia en su futuro comportamiento. Sin embargo, no hay absolutos y dicha carga de información puede ser mejorada por medio del adecuado aprendizaje del reconocimiento de emociones y de adecuado manejo de ellas y especialmente de los factores estresores. La salud mental se transforma entonces en un factor clave al momento de querer plantear una estrategia de prevención de violencia y de construcción comunitaria.
Personas con un mejor manejo del estrés, y de sus emociones, están mejor preparadas para vivir de manera no violenta. Por tanto pueden también tener relaciones sociales de mejor calidad. Una comunidad no es más que la interacción constante de individuos que se reúnen con uno o varios propósitos en común, Si esos individuos son violentos posiblemente esa será una comunidad violenta, Si cada individuo esta en paz y armonía consigo mismo, es entonces muy posible que esa comunidad tenga como característica un modo de vida no violento. Es aquí donde toma relevancia el trabajo psico emocional orientado al individuo, el que sin duda debe ser también realizado en relación con otros miembros de la comunidad. Como seres gregarios, necesitamos de la comunidad y sentirnos parte integrante de ella es sin duda también un factor de alta relevancia para la mejoría a nivel individual. CPTED como metodología de prevención de violencia, inicia en los años 70, postulando que el mejoramiento del medioambiente puede ser fundamental para prevenir actos violentos. Se reconoce tres tipos de ambiente, el ambiente físico, el ambiente social, y el ambiente psico emocional.
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Desde los años 70 a los 80 CPTED trabajo fundamentalmente con el Ambiente Físico Construido, y esta fue su primera generación de aplicación. Posteriormente en los años 80 se desarrolla un fuerte trabajo con el Ambiente Social, y recientemente en 2019 se ha dado inicio a la tercera generación CPTED trabajando con los aspectos psico emocionales y el concepto de habitabilidad. CPTED de tercera generación incluye a las otras dos generaciones y se organiza un todo coherente basado en la pirámide de Maslow. En CPTED de tercera generación aparece como un factor de importancia la “auto realización Personal” el sentido de satisfacción personal. Esto sin duda va asociado muy fuertemente con la idea de “Salud Mental” Es en consecuencia con este aspecto que CPTED, en el marco de 3ra Generación promueve la aplicación de acciones, tanto a nivel comunitario como individual, que apoyen el trabajo psico social. CPTED 3ra Gen. Busca reconoce y apoya las acciones orientadas a la autorrealización, y el sentido de logro individual
La práctica artística como elemento de fortalecimiento psico emocional, sobre todo con jóvenes, prácticas como mindfulness, manejo de estrés, meditación para aprender a reconocer las emociones, y trabajarlas de modo que no afecten el comportamiento de modo negativo, técnicas de restauración emocional para el trabajo con comunidades en donde ha habido fuertes impactos de tipo emocional. Consejería psicológica a jóvenes afectados por problemas familiares, drogas, embarazo adolescente, Prácticas deportivas centradas en el logro de dominio y conocimiento corporal vinculadas a un trabajo mental, más que a la competencia. Yoga, artes marciales entre otras son herramientas que CPTED de 3ra generación promueve como instrumentos que apoyan a la salud mental de las personas y las comunidades.
Foto PIXABAY
Foto Wikipedia. Enciclopedia libre 26
A nivel comunitario, la resolución de conflictos, el aprendizaje de las estrategias en “Habilidades para la Vida”, fortalecimiento de resiliencia individual y comunitaria. CPTED reconoce que los ambientes físicos, social y psico emocional están íntimamente entrelazados entre si y que los tres constituyen un todo indivisible e inseparable. En este tiempo de pandemia, COVID-19, hemos podido observar como el confinamiento en un espacio físico ha afectado a muchas personas negativamente, tanto en las relaciones sociales como la salud emocional de ellas. Es por tanto que se hace indispensable tener conciencia de la importancia que tienen los tres ambientes en los cuales como seres humanos estamos íntimamente conectados; pero por sobre todo comprender que es desde el ambiente psico emocional desde donde nace el modo como construimos nuestras relaciones sociales e incluso como organizamos el espacio físico. Aprender a tener buena salud mental indudablemente nos conlleva a tener relaciones sociales saludables y espacios físicos saludables también. Por medio de la red global de CPTED a nivel mundial y a nivel Latino Americano con CPTED ICA LAC, promovemos la aplicación de proyectos CPTED que puedan incorporar los tres niveles de acción, físico, social y psico emocional. CPTED no solo promueve la construcción de comunidades más seguras y no violentas, sino que también debe haber personas más felices y realizadas. Una buena salud mental sin duda es un aspecto clave para dichos logros.
ICA-LAC ///
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