ENTREVISTA 24
¿Qué reflexión harías de la edición del 2012? ¿Qué te enseño aquella experiencia y sus críticas? Fue una vendimia simple, tradicional, creo que era necesario en ese momento, veníamos emergiendo de una gran crisis. ¿De qué depende el éxito de un espectáculo?, ¿Cuánto inciden los comentarios de la crítica? Todos los espectáculos son exitosos. La crítica tiene generalmente una tendencia marcada por su color político, te identifican a favor o en contra y manchan el proyecto cultural. Creo que para cada director, el hecho de tener la posibilidad de dirigirla ya debería ser un éxito. Yo aspiro al aplauso del público y al cariño de los artistas como siento que ocurrió en 2012. Como buen conocedor de Vendimias y del comportamiento de los artistas en relación a diferentes directores, el cariño que me expresaron fue maravilloso.
Los jóvenes podrán entusiasmarse con los cuadros de trabajos aéreos, acrobáticos, en donde hemos fusionado al carácter propio de la vendimia un gran dinamismo y progreso, al estilo “Fuerza Bruta”; y con la música que va a enamorar. ¿Cuál es tu criterio respecto de cómo se debe celebrar esta Fiesta? La fiesta tiene su propio género como el Carnaval de Brasil o el Cirque du Soleil. Hay que respetar a la Virgen, San Martín, el huarpe, los inmigrantes, el festejo de la cosecha; hay que ensalzarlos y fusionarlos con la modernidad que nos propone la tecnología para no perder de vista aquello que ha caracterizado siempre a la fiesta y que la ha convertido en un género en sí misma.
No creo en las Vendimias que transgreden el género, porque de alguna manera le faltan el respeto a los iconos culturales. Si se busca transgredir debe ser llegando al público a través de la sensibilidad. ¿Qué director desde este punto de vista ha sido transgresor? (Prefiere no contestar). ¿A quién destacarías por su labor de dirección, alguien que haya influido en tu trabajo? Para mí el director universal de la Vendimia, por su propuesta integral y la forma en que escribió los guiones, fue Abelardo Vázquez. Más contemporáneo, Pedro Maravini, quien marcó un gran cambio al transformar la fiesta en un show, luego destaco el trabajo de Vilma Rúppolo y Héctor Moreno porque han sabido mantener el género, popularizándolo y han trabajado con diversos elementos el sentimiento del público. “La vendimia es un espectáculo, y el espectáculo tiene que marcar picos de emoción como un electrocardiograma”. ¿Cómo te describirías en tu ejecución? Mi rol es el de guiar, contener, aprobar o no, y si no me gusta, decir: cambiemos, charlemos, encontrémosle la vuelta, soy muy amplio, respeto la visión de cada integrante del equipo