cuidadoso de los aspectos de confianza asociados a esa relación. El industrial tiene en mente la producción y vida de su producto desde que lo concibe y es consciente de la necesidad de no comprometer las condiciones de vida de las generaciones futuras y de su entorno. Pero, además de todo eso, el industrial es consciente de que la sociedad y la comunidad en la que se ubica, no son perfectas, encierran distorsiones y desequilibrios que conspiran contra sus aspiraciones y contra su competitividad, pero que también son fuentes de inequidad y de discriminación. Y es ahí que busca su asociación con otros industriales persiguiendo en el apoyo mutuo y con el trabajo cooperativo mejores condiciones para el desarrollo de su empresa y del sector. (Citado por el señor Juan María González, Presidente de la Cámara de Industrias de Costa Rica. Publicado dentro del editorial del periódico Actuar, setiembre, 2008)