Los ciclos astronómicos y de la naturaleza fueron ritualizados y registrados por los mayas en su arte y códices para ser incorporados en la alineación de sus edificios a través de un complejo sistema matemático, que aún hoy sigue sincronizándose con absoluta perfección con los periodos universales de tiempo. Estos marcan puntualmente el inicio de los ciclos; que de manera sagrada tanto para los mayas de ayer, como para los mayas de hoy, simbolizan la renovación del espíritu y de los sagrados periodos de la tierra. Así, un nuevo ciclo trae la esperanza del sustento que da la tierra. Es tiempo de sembrar, tiempo de cosechar los frutos, tiempo de amar la tierra. Este 2015 renueva tu contemplación del mundo, bienvenido al tiempo del Baktún.