01 mia esta noche

Page 47

simpática. Al fin y al cabo, ni siquiera conocía a Sam y estaba viviendo en su casa. En cualquier caso, el comentario de Kara le hizo sentirse arropado, especial. Nadie que lo hubiera comparado con Sam lo había considerado guapo, excepto quizá su madre. Las mujeres que se acostaban con él lo hacían por motivos económicos; se trataba de un acuerdo mutuo que le había convenido… ¡hasta ahora! Con Kara era otra historia. Su instinto le advertía de que llegar con ella a un trato similar lo mataría por dentro. Cuando se sentaron a la mesa del comedor, Simon se acordó de que tenía que darle una cosa. —Tengo algo para ti. Casi suelta una carcajada al ver la reacción de ella, que frunció el ceño, negó con la cabeza y respondió: —Simon, no voy a aceptar nada más. Ya has hecho bastante por mí. Demasiado. Aunque a él no le parecía que hubiera hecho bastante, se limitó a replicar: —Esto sí lo aceptarás. —Que no. Madre mía, ¡se moría de la risa cuando se ponía tan cabezota! Echó la silla hacia atrás y se metió la mano en el bolsillo delantero de los vaqueros. Extendió la mano pero, como Kara seguía negando con la cabeza con obstinación, dejó el objeto sobre la mesa. —Dios mío… —susurró Kara con una voz llena de asombro y deleite. Cogió el anillo con dedos temblorosos y se lo puso despacio—. ¡El anillo de mi madre! Pensé que no volvería a verlo. ¿Dónde lo has encontrado? —En una casa de empeños —respondió satisfecho de haber hecho que sus empleados rastrearan la zona hasta encontrarlo—. Sabía que era la única cosa que te había entristecido perder. —No tiene mucho valor, pero para mí significa mucho. Es lo único que tengo de mi madre. —Estaba tan emocionada que se le quebró la voz. Simon no le confesaría jamás que su compañera de piso tan solo había sacado un par de dólares a cambio de la sortija que ahora llevaba en el dedo. Era un anillo en forma de mariposa con una diminuta amatista en el centro. Tenía muy poco valor, pero Simon sabía que a Kara le dolía haberlo perdido. —Me alegra que lo hayamos encontrado.


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.