Esta obra, con una extensión de 7.686 metros de red instalados, permitió el acceso al agua potable a 2.800 vecinos aproximadamente. Es importante señalar que, el desarrollo de esta metodología fue acotándose en la medida que se fueron priorizando las obras de los planes Agua +Trabajo y Cloaca + Trabajo en cada uno de los municipios del área de acción de AySA.
Planes Agua + Trabajo (A+T) y Cloaca + Trabajo (C+T) Estos planes, iniciativa del Gobierno Nacional, surgen con el doble propósito de: atenuar el riesgo sanitario de la población sin acceso a estos servicios y generar fuentes de trabajo mediante la conformación de cooperativas, a las que se capacita para la ejecución de las obras. -
El GOBIERNO NACIONAL: adopta las medidas para concretar el plan. AYSA: diseña el proyecto, se encarga de la logística de los materiales, la supervisión técnica de redes y pozos, el acompañamiento social de las distintas etapas de los proyectos y, desde el año 2007, financia las obras. Además, a través del Instituto de Capacitación y Formación del Sindicato Gran Buenos Aires de Trabajadores de Obras Sanitarias (SGBATOS), capacita a los cooperativistas en el desarrollo de habilidades técnico-operativas. - El MUNICIPIO: participa como impulsor de los proyectos y como ente ejecutor de las obras. - El INSTITUTO DE ASOCIATIVISMO Y ECONOMÍA SOCIAL (INAES): presta asistencia técnica y legal para la conformación de las cooperativas. - Las COOPERATIVAS DE TRABAJO: aportan la mano de obra.
Cómo se ejecuta la expansión La expansión se realiza a través de la ejecución módulos. - Un módulo de agua es una obra de aproximadamente 5.000 metros de cañería y 500 conexiones domiciliaras. - Un módulo de desagües cloacales es una obra de 3.000 metros de cañería y 300 conexiones domiciliarias.
RS AySA 2011
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Estela Barzola, vecina del barrio Los Alamos, La Matanza “Hay gente que va de acá a diez cuadras a traer agua, porque los pozos de acá están contaminados, tenemos una perforación pero sale contaminada el agua, no se puede tomar, hay veces que sale turbia. Entonces, empezamos a hablar con los vecinos y a juntar firmas, y empecé a hacer una nota (…) no fue tal vez muy bien expresada porque no me sé desenvolver bien pero mandé una nota a AySA y le pedí si nos podían dar el agua (…) estamos olvidados acá y el otro día el lunes, vino Miguel y nos confirmó que se había aprobado, y ahora estamos esperando a ver cuándo empieza la obra por acá, que ya de hecho nos pone muy feliz a todos acá, todo el barrio está contento por eso”.