EMILIO SALGARI
CAPÍTULO XI EL REGRESO DE KAMMAMURI Convencidos los dayakos de que no era fácil tomar el “kampong” al asalto, sobre todo después de la desastrosa prueba que habían realizado y que les había causado pérdidas gravísimas, decidieron establecer el sitio en toda regla, en espera de que los defensores tuviesen que capitular, acosados por el hambre. Construyeron en derredor de la llanura cuatro campos atrincherados para precaverse contra una posible salida de los sitiados, reforzándolos con trincheras, elevadas seguramente bajo la dirección 178