Sábado 5 de Marzo de 2011
TEMAS
CE
PADRE DOMINGO MUÑOZ G.
COMENTARIO DEL EVANGELIO DEL DOMINGO
(Mateo 7, 21-27)
“BUSQUEN PRIMERO EL REINO Y SU JUSTICIA, Y TODAS ESAS COSAS SE LES DARÁN PÓR AÑADIDURA”
H
ermanos y hermanas, les saludo en la paz y en el amor de Jesús y de María Santísima. Nuestra Madre. Celebramos el noveno domingo del tiempo de la Iglesia y el próximo miércoles 9 vamos a iniciar el tiempo de cuaresma con la imposición de ceniza. El Evangelio nos invita este domingo a reflexionar sobre las dos casas, construidas al mismo tiempo y de apariencias semejantes. Se puso de manifiesto la gran diferencia que existía entre ambas cuando llegó la prueba; las lluvias y los fuertes vientos. Una de ellas
se mantuvo firme, porque tenía buenos cimientos, la otra se vino abajo porque fue construida sobre arena; su ruina fue completa. Al que levantó la primera edificación, la que permaneció en pie, le llama el Señor hombre sabio, prudente, al constructor de la segunda, hombre necio. La primera casa resistió bien los embates del invierno, no por la belleza de los adornos, ni siquiera por tener buena techumbre, sino gracias a sus cimientos de roca. Aquella casa perduró en el tiempo, sirvió de refugio a su dueño y fue modelo de buena construcción. Así es quien edifica su vida sobre
el deseo llevado a la practica de cumplir la voluntad de Dios en lo pequeño de cada día en los asuntos importantes y, si llegan, en las contrariedades grandes. Por eso hemos visto a enfermos debilitados en el cuerpo por la enfermedad, pero con una voluntad fuerte y un amor grande, llevando con alegría sus dolores, porque veían, por encima de su enfermedad, la mano de un Dios providente, que siempre bendice a quienes le aman, pero de formas bien diferentes. Y quien siente la difamación y la calumnia, o el que padece la ruina económica y ve como sufren los suyos, o el muerte de un ser querido, o aquel que sufre la discriminación en su trabajo a causa de sus
creencias religiosas. La casa, la vida del católico que sigue con hechos a Jesús, no se viene abajo porque está edificada sobre el más completo abandono en la voluntad de su Padre Dios. Abandono que no le impedirá la defensa justa cuando sea necesaria llevando a cabo todo con serenidad, sin agobios y sin amargura ni rencores. Para permanecer firmes en los momentos difíciles, tenemos necesidad de aceptar con buena cara en los tiempos de bonanza las pequeñas contrariedades que surgen en el trabajo, en la familia. La fidelidad en lo pequeño, que apenas se advierte, nos permite la fidelidad en lo grande, ser fuertes en los momentos decisivos. Un fundamento recio y
PARROQUIA SAN JOSÉ DE PINTUÉ
fuerte puede servir también de cimentación a otras edificaciones más débiles; no se queda nunca solo. Nuestra vida interior, cuajada de oración y de realidades, puede servir a otros muchos que encontrarán. La fortaleza necesaria cuando flaqueen sus fuerzas, porque las dificultades y tribulaciones sean duras y difíciles de llevar. Deseo a todos ustedes una semana plena de confianza de Dios. Que Dios, Uno y Trino, y María Virgen y Madre les bendigan.
Una labor, un personaje... Una vida al ritmo de la música
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Puente Alto Al Día
odeada de instrumentos musicales, alumnos, partituras y sonidos pasa su día Margarita Vergara, así ha sido casi toda su vida, desde que era pequeña y sus padres y abuelos la llevaron por el camino de la música, alegrando la vida de ella y sus hermanos. Tenía apenas un año cuando llegó a Puente Alto, sus padres habían partido poco antes desde La Serena buscando nuevos rumbos para la familia. Llegaron cuando todo era campo y de a poco la madre y el hermano mayor comenzaron a edificar la casa donde Margarita vive hasta el día de hoy. Margarita estudió en la Escuela Consolidada, tuvo una linda infancia, recuerda que jugaba entre la tierra con sus hermanos y las tardes de lectura, “mi mamá prendía un brasero y se instalaba a dramatizar libros de historia, era una belleza, nosotros esperábamos que llegara la tarde para escucharla”, cuenta Margarita. Era apenas una adolescente cuando partió a estudiar a Santiago, partía a las seis de la mañana a sus clases en un instituto, luego estudió Arpa en el Conservatorio de Música por cuatro años cumpliendo el sueño de sus padres y hermano mayor, quienes la orillaron a la música. Apenas titulada comenzó a hacer clases y entregar su talento a los demás, abrió junto a su hermano el Instituto de Música América Siglo XXI, donde cientos de alumnos han recibido clases de los más diversos instrumentos. Con ellos pasa su día, entre los profesores, las clases, preparando galas y buscando formas de que al instituto le vaya cada vez mejor. Todos en su familia son músicos, sus hermanos tocan piano, sus sobrinas hacen clases en el instituto, otra estudia en España y otra es directora de la Orquesta Juvenil Municipal, “somos una familia dedicada a la música, esto nos apasiona, para mí este no es un trabajo, me gusta estar entre los alumnos y hacerlos mejores cada día, tenemos un nivel muy bueno que vamos mejorando”, señala Margarita. Descansa muy poco, corre todos los días entre el instituto y su casa, donde vive con su hijo Guillermo de 22 años que estudia percusión y con su madre Gladys Carvajal, que ha sido su gran ejemplo de esfuerzo y trabajo. Muchos sueños aún le quedan por cumplir, pero dice que “se irán cumpliendo a medida que las cosas se vayan dando”, entregar música a todo el pueblo y hacer intercambios culturales están entre sus más grandes ideales. Fundado el 14 de Septiembre de 1962