Tú, ¿Quién eres que me arrastras?

Page 54

Tú, ¿Quién Eres Que Me Arrastras? 73

—¿Trabajas como guardia de seguridad? Cuando estabas en el ejército, eras muy sagaz y bueno en lo que hacías. —¿De verdad? ¿En qué era bueno? —Mira, sé que nuestro gerente de materiales va a renunciar, y creo que su puesto estará vacante dentro de más o menos un mes. ¿Por qué no vienes a trabajar en mi compañía? —¿Una persona como yo puede tener ese tipo de empleo? —Te conozco; sé que lo harás bien. No puedo pagarte mucho mientras estés en capacitación. Recibirás dos mil quinientos dólares mensuales y, después de dos meses, cuando termine tu capacitación, te pagaré tres mil dólares al mes. No es mucho, pero será suficiente para que vivas sin tantas penurias. Aquí tienes mi tarjeta. Realmente espero que vengas a trabajar conmigo. —Sí, claro. Muchísimas gracias. Llegó a su casa por la tarde y, cuando le contó a su esposa lo que había ocurrido en el día, ella se puso feliz. Unos cuantos días después, recibió una llamada de la compañía; le indicaron presentarse a trabajar el mes siguiente. El primer día de trabajo, se calzó los zapatos nuevos que había comprado con dinero prestado, se vistió con ropas nuevas y se dirigió a la compañía. —Jefe, pensé que sería pobre durante toda mi vida, y quiero agradecerle muchísimo el tomar en cuenta a una persona como yo. Jamás olvidaré el gran favor que me hace. —Mira, te conozco bien, y sé que harás un gran trabajo. —Sí, lo haré. Trabajaré con todo mi corazón para no avergonzarlo y corresponderle, señor. Cuando trabajaba como guardia de seguridad en las bodegas, pasaba todo el día sentado, leyendo y perdiendo el tiempo. En cambio ahora, que era gerente de materiales, el Queda prohibida la impresión total o parcial de esta publicación, sin contar con la autorización previa, expresa y por escrito del editor.


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.