La gente se conoce a sí misma muy bien en términos de edad, nombre, estatura, tipo de sangre, formación académica y relaciones familiares. Pero cuando se trata de la imagen de su corazón, o de cómo o hacia dónde fluye éste, no sabe nada. Lo más importante es el corazón, puesto que cualquier decisión se toma a partir de él; no obstante, como la gente desconoce cómo está formado el corazón, no sabe cómo manejar su propio corazón.