En los 60 y 70, las preocupaciones ambientales comenzaron a hacerse camino hacia el diseño. Frank O’Gehry
trabajó
con
cartón
en
capas
gruesas
laminadas como si fueran un único sólido, en vez de ser compuesto de múltiples piezas laminadas. Tomando su inspiración de las maquetas arquitectónicas, él usaba los bordes expuestos del cartón corrugado en vez de utilizar las superficies planas.
Troquelar el corrugado grueso le permitió crear formas complejas como las arabescas de su mecedora. Después continuó sus experimentos con corrugado laminado, produciendo un sillón en 1980 que tenía bordes irregulares causados por el desplazamiento de las piezas de cartón. Naturalmente, habría de llamarla “serie
de
bordes
preocupación
por
duros”. un
Con
diseño
una y
creciente
manufactura
ecológicamente responsables, diseños como los de Gehry fueron admirados por su apariencia reciclada, dado que usaban materiales de desperdicio que eran fácilmente hallados en empaques o embalajes.