8 Octubre 04 de 2010
Informe
Leer sin reflexionar es como comer sin digerir.
Viene de la página 13
nombre del niño para protegerlo y evitar que muera después de la operación que le extirpara el riñón. Ortiz en medio de las lagrimas de los asistentes dijo: “Como no quiero aparecer como el bueno con el dinero de los demás propongo un fondo para ayudar a Kevin y yo aporto 10 millones de pesos.” El congresista vallecaucano concluyó su intervención con una frase elocuente: “No quiero ser importante quiero ser útil a la sociedad”. En medio de los aplausos la respuesta fue muy generosa de parte de los empresarios de Apuestas lográndose una importantísima donación de la siguiente manera: Roberto Ortiz: 10 millones Apuestas Asociadas de Tulua: 5 millones Apuestas Cucuta: 5 millones Josue Inmobiliaria: 5 millones Apuesta Yumbo y Jamundi: 5 millones Apuestas Ochoa: 5 millones Super Giros: 5 millones Apostar S.A: 5 millones Gane de Cali: 5 millones Gana de Medellin: Amoblara la casa Empresa de Inague y Tolima: 5 millones para la educación del niño. 55 millones de pesos donaron los empresarios de Super Giros para la familia de Kevin Saldarriaga.
Doña Amparo Ortiz, abuela de Kevin, no podìa creer que se hubieran reunido 55 millones para la compra de la casa y el estudio de su nieto. El Representante Ortiz, agradecio la generosidad de los empresarios de Super Giros.
Mi Dios les bendiga E
El drama de la familia de Kevin es impresionante. Roberto Ortiz escucha atentamente las necesidades de esa familia antioqueña.
n medio de las lágrimas la abuela de Kevin, Amparo Ortiz, agradeció el gesto generoso de los empresarios de Súper Giros y clamó a Dios para que proteja a Roberto Ortiz, el gestor del milagro de tener su nueva vivienda. Doña Amparo una mujer antioqueña aguerrida que lucha sola pese a su avanzada edad para sacar adelante a su familia le había comentado a larazondecali. com que en ocasiones duraban varios días sin comer porque su familia es muy numerosa. Pese a la solidaridad de sus vecinos las necesidades son muchas y pocas personas se echan el piano al hombro de ayudarlos. “Hay días que siento que es mejor no vivir, pero al ver a mi muchachito Kevin esos pensamientos se me alejan. Yo no sé qué será de mi familia cuando muera”, dijo en medio de las lagrimas.