DISFRUTAR DE LA SOLEDAD
DISFRUTAR DE LA SOLEDAD Victoria E. Paternó
Hay quienes la necesitan para vivir en tranquilidad y hay quienes temen de ella como si de una terrible condición se tratara. Hablamos de la soledad. Aprende a disfrutar sin miedo de la mejor compañía: ¡tú mismo!
Imágenes: Dreamstime.
La soledad trae inherente una connotación negativa que provoca predisposición en la mayoría de las personas. Sin embargo, ésta oculta un abanico de beneficios siempre y cuando se practique balanceadamente. Nos puede brindar calma, equilibrio, paz y seguridad. Es terapéutica ya que permite controlar los malos sentimientos, al mismo tiempo que recarga nuestras baterías. Se trata de una soledad cuyo objetivo principal es la intimidad y no exclusivamente el hecho de “estar solos”.
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Social y solitario Es importante no confundir soledad con aislamiento. El ser humano es un ser instintivamente gregario, necesita de sus semejantes para sobrevivir y para vivir satisfactoriamente. Nacemos y crecemos rodeados de personas que no solo nos ayudan a desarrollarnos, sino también nos reconfortan, nos dan seguridad y compañía y nos distraen de nuestros problemas. Nos acostumbramos a estar acompañados y por eso le tememos a la soledad. Ese temor se debe a que es el momento en el que nuestra voz interior nos habla, es el momento de enfrentar nuestros problemas.
Sin embargo, cada vez que leemos un libro, dormimos una siesta, cocinamos o meditamos, estamos sin darnos cuenta deseando estar solos. Es hacer una pausa y estar con nosotros mismos. Es por eso que el ser humano es tan social como solitario. Y una vez que está cómodo consigo, disfruta plenamente de su compañía sin esperar la aprobación u opinión de los demás. La psicóloga Antonella Barbarito dice que aprender a estar con nosotros, disfrutarnos y conocernos puede ser una experiencia interesante. La experta nos explica que no es mejor ni peor estar sin compañía, simplemente es diferente, y en determinadas circunstancias es una necesidad.