Contextualización socio histórica - El Vampiro de la Colonia Roma

Page 1

Universidad Nacional Autónoma de México

Facultad de Filosofía y Letras

Colegio de Estudios Latinoamericanos.

México Contemporáneo (1929-1979). Mtro. César Enrique Valdez Chávez

Contextualización socio-histórica de la obra de Luis Zapata El vampiro de la colonia Roma.

Rodrigo Pérez Toledo


Índice

Introducción …………………………………………………………………………..3

Antecedentes históricos………………………………...……...4

El nacimiento del movimiento de liberación homosexual en México…………………………………...…….5

El Vampiro de la Colonia Roma……………………..……….8

Conclusiones…………………………………………...………11

Bibliografía…………………………….………..…………………..……………….12

Introducción 2


El presente trabajo tiene como objetivo hacer una contextualización histórica, pero también rescatando aspectos sociales y culturales, de la obra de Luis Zapata, El vampiro de la colonia Roma, publicada en 1978. Por otra parte, el lector no debe esperar de este trabajo una crítica literaria, puesto que el autor no está en capacidades de hacerlo. Serán retomadas algunas publicaciones y hechos de la vida pública de México a partir de los cuales se ha ido creando la imagen del homosexual que predomina en el imaginario de los mexicanos. Desde el baile de los 41 maricones hasta las multitudinarias Marchas del Orgullo Gay que se celebran a lo largo y ancho del país, el movimiento homosexual ha madurado hasta llegar a las esferas de la vida pública y política de México, hasta lograr exigir sus derechos y, más aún, hasta que se reconozcan públicamente. Mucho ha sido hecho por personas que se han preocupado y dado a la tarea de visibilizar al movimiento, de institucionalizarlo, de hacerlo parte de la vida pública; sin embargo, mucho queda por hacer. Las bases para que haya un mejor entendimiento y aceptación por parte de la sociedad ya han sido construidas, sólo falta reforzarlas y aumentarlas. La obra de Zapata marcó un parteaguas en la visibilidad del movimiento. Hasta antes era un tema desconocido del que no se hablaba, tabú para muchos sectores de la población. Posteriormente comenzó a ser aceptado, discutido, institucionalizado y estudiado. Además, debe entenderse que México no es un ente aislado de la escena mundial que se vivía a mediados del siglo XX. Muchos de los movimientos políticos y sociales que sucedieron principalmente en Estados Unidos y Europa llegaron, con mayor o menor fuerza, a nuestro país y fueron adaptados a su realidad. Así, poco a poco se fue cultivando un escenario para que los gays mexicanos salieran del clóset a finales de la década de los 70, casi 10 años después del incidente del Stonewall Inn en Nueva York, pero mucho antes que casi cualquier otro país tercermundista. Finalmente, este viaje a lo largo de la historia cultural del movimiento de liberación gay es algo que no ha terminado, que tiene que pasar por procesos de unión y de fortalecimiento que lo ayuden a consolidarse. Empero, no hay que despegarse de la realidad de nuestro país, realidad donde la teoría Queer es ajena e inentendible, donde seguimos teniendo crímenes por homofobia y suicidios de personas que han sido vejadas durante años. Es por esto que se debe pensar en una estrategia social, cultural que acerque a la sociedad al movimiento, que ayude a que lo entienda, que lo respete y lo apoye. Finalmente, en este trabajo quiero rescatar la geografía de los lugares de homosocialización en la Ciudad de México. Muchos de ellos estuvieron en la clandestinidad hasta que la sociedad los aceptara o, cuando menos, los tolerara. 3


Esta idea de los lugares de homosocialización la rescato de gran parte de los autores que conforman la bibliografía de este trabajo y que afirman que para que un movimiento, un grupo, una comunidad se consolide debe tener un sustento físico, un lugar en el espacio donde visibilizarse, congregarse y estar constantemente presente en la trama urbana de la ciudad.

Antecedentes históricos Durante mucho tiempo, el único referente que se tuvo para la homosexualidad masculina fue un penoso incidente que se desarrolló a inicios del siglo XX. La alta élite porfiriana fue la protagonista de este incidente. En la 4ª calle de Paz, actual Ezequiel Montes, la policía irrumpió en una casa creyendo que se desarrollaba una conspiración en contra del gobierno del general Díaz, a su entrada descubrió que había 22 hombres y otros 19 vestidos como mujeres bailando entre ellos. Existen varias versiones de lo que pasó con los asistentes al baile, algunas dicen que fueron deportados a Yucatán, a los Valles de Oaxaca, o que fueron obligados a barrer las calles aledañas a donde fueron encontrados vestidos, como fueron encontrados, de mujer (Beltrán, 2010; Gómez González, 2001; Monsiváis, 2001). Ignacio de la Torre, yerno político del general Díaz fue el participante número 42. Este personaje fue liberado rápidamente y toda evidencia de su presencia fue ocultada debido a la cercana relación con el general Díaz. La lista de los asistentes a este baile nunca fue publicada y el gobierno trató por todos los medios de evitar que el incidente se conociera. No obstante, la prensa publicó notas haciendo mofa del suceso. (Imagen 1.1) La sociedad fue olvidando el suceso hasta que en 1906 un autor anónimo bajo el pseudónimo de Eduardo Castejón publicó Los cuarenta y uno: novela crítico-social. A pesar de ser una novela con un discurso homofóbico evidente, fue la primera que trató el tema públicamente. Esta novela estuvo oculta durante muchos años hasta que en 2010, más de 100 años después de que fuera escrita fue rescatada y publicada por la UNAM. . .

Imagen 1. El periódico Hoja suelta publicó esta historia El autor es José G. Posadas

Sin embargo, como afirma Gómez González (2001), Salvador Novo escribía que entre los homosexuales de principios de siglo “los exquisitos aristócratas celebraban fiestas: aunque privadas, sin duda trascendidas a la murmuración”. 4


Durante la primera mitad del siglo XX lo poco que se decía de la homosexualidad servía para hacer mofa de ella, para tratarla como una enfermedad y para humillar públicamente a los homosexuales. La censura que se dio a la novela fue porque, según Beltrán (2010) […] contradice las versiones de la hombría y la virilidad con las que se construía la identidad del mexicano en las novelas y las películas de la primera mitad del siglo pasado.

Como sostiene Monsiváis (2001) la condena pública de la homosexualidad que se dio en aquel momento, permitió y solapó que hasta los años 80 hubiera redadas y persecuciones hacia los homosexuales, con los posteriores encarcelamientos, extorsiones y vejaciones. Para ser más exactos, me permito rescatar sus palabras […] A partir de ese momento, se sienta jurisprudencia y lo que viene es legal porque ya lo fue: redadas continuas, chantajes policiacos, torturas, golpizas, envíos a las cárceles y al penal de las Islas Marías. Sólo se necesita una frase en el expediente: "Ofensas a la moral y las buenas costumbres". No hace falta más, no hay abogados defensores (en el caso de los jotos ni siquiera de oficio), no hay juicios, sólo caprichos judiciales dictados por el prejuicio y "el asco". Y la sociedad, o la gente que se entera, encuentran normales o admirables esos procedimientos.

Asimismo, la condena era ser enviados a la cárcel de Lecumberri, y ser encerrados en la crujía marcada con la letra ‘J’, para ser posteriormente enviados a las Islas Marías. De esta relación entre la crujía y la homosexualidad proviene la injuria de ‘joto’ para llamar despectivamente a un hombre homosexual. (Gómez González, 2001; Laguarda, 2008) El movimiento cultural posrevolucionario exigía que hubiera hombres, machos, que hicieran gala de su virilidad. Por esto mismo, autores como Salvador Novo, Villaurrutia, Pellicer y Nandino fueron condenados por los grupos de intelectuales debido a su dudosa moral y exagerado afeminamiento (Gómez González, 2001)

El nacimiento del movimiento de liberación homosexual en México El mundo estaba en constante cambio, la política, la economía, la sociedad. Todo cambiaba y tomaba nuevos rumbos que antes no eran imaginados. Hobsbawm, (1995) hace énfasis en la revolución cultural que se gestaba en las sociedades más desarrolladas en la segunda mitad del siglo XX. La liberación homosexual se dio en las décadas de los 60 y 70 en los países desarrollados. La clave de esta revolución cultural fueron los jóvenes, particularmente estudiantes de clase media o alta, quienes se 5


convirtieron en la antítesis de los modales tradicionales que sus familias pregonaban. La vestimenta, la música, las ideas, la sexualidad, todo era proclive a la transgresión, a los cambios sociales y a la evolución. En EU, particularmente en San Francisco y Nueva York hubo la aparición pública de una subcultura homosexual practicada abiertamente. (Hobsbawm, 1995). Consecuencia de esto fue que las relaciones homosexuales se despenalizaron en algunos estados de EU (Laguarda, 2008) Sin embargo, es preciso recordar que sigue siendo ilegal en 18 estados. Laguarda (2008) retoma esta idea y cita a Giddens (2000) para enfatizar la idea de que uno de los logros de la revolución cultural que vivió el mundo, particularmente el occidental, en la segunda mitad del siglo XX es el de la autonomía sexual femenina y el de la visibilización de los homosexuales. El inicio del movimiento de ‘liberación homosexual occidental‘ fueron los incidentes en el bar Stonewall Inn (Stone Wall riots) que sucedieron en Nueva York en 1969. Este momento fue el primero en la historia mundial donde un grupo de hombres gays que estaban en un bar se enfrentaron violentamente contra la policía como una muestra de hastío por las políticas y leyes de discriminación de las cuales eran objeto (Laguarda, 2008). A partir de estos incidentes se formó el Gay Liberation Front, que fue la organización que luchó por los derechos de los homosexuales en EU (Gómez González, 2001). Esto fue el preámbulo para que en 1973 la American Psychiatric Association eliminara a la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales y que el 17 de mayo de 1990 la Organización Mundial de la Salud hiciera lo propio. La cercanía de México con Estados Unidos hacía evidente que estas ideas llegarían y permearían a nuestra sociedad (Diez, 2010; Laguarda, 2008). Empero, esta apropiación de ideas y conceptos no fue rápido, durante mucho tiempo se siguió tratando a la homosexualidad como un tema tabú. Cabe destacar que las ideas provenientes de EU tenían que ser adecuadas a la realidad de un país tercermundista como México. La liberación sexual se vio entonces mermada por los problemas sociales como pobreza, marginación, creencias religiosas, que nuestro país enfrentó y sigue enfrentando. Los cambios que se vivían en el mundo, la revolución social y cultura descrita por Hobsbawm (1995) fueron la base sobre la que se construiría y se institucionalizaría el movimiento homosexual en México (Diez, 2010). El Movimiento homosexual mexicano contó con dos grupos, el Frente Homosexual de Acción Revolucionaria (FAHR) y Grupo Lambda. Las mujeres lesbianas fundaron el grupo Oikabeth. Estos grupos tuvieron poca 6


presencia política, pero ayudaron a difundir actividades y cuestiones inherentes a la comunidad homosexual. La primera aparición pública de un contingente homosexual fue el 2 de octubre de 1978, en el décimo aniversario de la matanza del 2 de octubre. Laguarda (2008), basándose en Luis González de Alba (1998) recrea el momento en el que el contingente del FAHR entró a la Plaza de las tres Culturas El 2 de octubre del mismo año, 1978 […] la gran manifestación que conmemoraba los 10 años del movimiento estudiantil admitió un contingente inesperado: los militantes del FHAR, Frente Homosexual de Acción Revolucionaria, marcharon hasta Tlaltelolco. En el edificio Chihuahua, de infausta memoria, se había instalado, como aquella trágica tarde de hacía entonces diez años, el equipo de sonido. Desde el tercer piso, un maestro de ceremonias levantaba los ánimos de los presentes sobre la plaza anunciando la entrada de cada contingente. De pronto distinguió la manta del FHAR y, ya encarrerado, comenzó a leer con voz estentórea el nombre de la organización entrante: “Y ahora llega el Frente…” enmudeció aquella sonora y militante voz… “Llega el Frente… gulp… de Acción Revolucionaria”. Así adecentados entraron a la Plaza de las Tres Culturas los primeros homosexuales mexicanos organizados y públicamente asumidos. Este contingente fue la primera movilización en México en que los homosexuales salieron públicamente a defender sus derechos. Sánchez Suárez (2004) enfatiza que la ‘salida del clóset’ de los gays mexicanos se debió a las movilizaciones que tuvieron lugar en la década anterior. De entre todas ellas, la de 1968 fue la más importante. Para 1979 se organizó la primera Marcha del Orgullo Homosexual en México, no obstante, no estuvo exenta de una desvalorización y discriminación que, obligados por el DDF, les hizo marchar por una calle paralela a Paseo de la Reforma (Diez, 2010). En 1980, la segunda Marcha del Orgullo gozó de una mayor visibilidad y desde ahí, la organización Lambda denunció los malos tratos de los que eran objeto los homosexuales (Laguarda, 2008). El incipiente movimiento homosexual mexicano se topó en 1983 con un enemigo con el que no ha dejado de luchar: el VIH/SIDA. Esta enfermedad se presentó por primera vez en 1981 en EU y fue rápidamente asociada con los el grupo de los hombres que tienen sexo con otros hombres, por lo cual, comenzó a ser estigmatizada y a creer que homosexualidad y VIH/SIDA son sinónimos.

7


En este punto, me atrevo a afirmar que es un enemigo con el que no ha dejado de luchar por dos razones, por la cantidad de infectados que hay - según informes de la Secretaría de Salud y CENSIDA, 83 % del total de infectados son hombres - y porque la relación entre homosexualidad y VIH/SIDA sigue estando presente en esta sociedad. A esto es importante aunar las mínimas medidas de protección que las personas tienen que son consecuencia directa de una falta de información y educación sexual formal en el país.

El Vampiro de la Colonia Roma Como fue mencionado anteriormente, la única literatura homosexual que hubo en México fue la de Eduardo Castejón en 1906 con un tono homofóbico, pero que ya hablaba abiertamente de la homosexualidad. Desde aquel 1906 hasta la publicación de El Vampiro de la Colonia Roma, en 1978, no se hablaba públicamente de la homosexualidad. Es por este hecho que el movimiento homosexual debe a Luis Zapata haber escrito una novela que abordara la homosexualidad sin tapujos, de una manera libre, de manera que expusiera la vida de un hombre gay. Al exponer las vicisitudes de la vida de los hombres gays en la Ciudad de México difuminó mitos y barreras que hubo durante mucho tiempo. Otro de los grandes logros de la novela es el de ser ampliamente conocida. Con sus limitantes, como es obvio, pero es una novela o un título que está en el imaginario de la sociedad mexicana contemporánea y que es una muestra pública y evidente que los hombres gays existen en la sociedad. Posterior a la publicación de la novela de Zapata en 1978 siguieron otras. Particularmente una que tuvo una importancia considerable y que se difundió fue Ojos que da pánico soñar, de José Joaquín Blanco, en 1979 y que fue publicada en el periódico unomásuno. Anterior a 1978, muchas de las novelas, o casi cualquier escrito, con temática homosexual era censurado, se publicaba incompleto, o se publicaba en partes. De tal forma que El Vampiro de la Colonia Roma fue también el primer libro publicado íntegramente. Es preciso destacar las creaciones literarias anteriores, podemos citar Muchacho solo en 1976 y Octavio en 1982 de Jorge Arturo Ojeda, El diario de José Toledo de Miguel Barbancho Ponce en 1964. Quizá la primera publicación con temática homosexual fue Los machos cabríos en 1952, de Jorge Ferretis. Este escrito se publicó en el libro El coronel que mató a un palomo. Cabe destacar que esta publicación fue muy corta y era parte de un libro mayor. Para enfatizar el valor de la obra de Zapata el presente trabajo rescata pasajes de ésta y los sustenta con estudios que han sido hechos en distintos campos y que ayudan a entender a la homosexualidad en el contexto histórico en que se desarrollaba y en su actual estadío. 8


Zapata (1978) en su primer capítulo, proporciona una evidencia de la forma de identificación de los hombres homosexuales. […] pero uno

como homosexual

gente su este

su onda sexual

ha aprendido a ver en la cara de la haz de cuenta

tú no puedes describir

una cara de menso, pero ves a alguien en la calle que tiene cara de menso y dices Lo ves

“ah

pues este buey tiene casa de menso”

lo sientes

entons así es ¿no?

aunque no lo sepas definir […]

El hecho de poder identificar a hombres homosexuales, llamado en el argot homosexual gaydar es lo que Nicholas (2004) estudió y definió como Gaydar is used as a ‘survival strategy’, a way to function within heterosexual standards. Justamente este tipo de identificación no obvia tenía que hacerse debido a la presión pública que suponía ser homosexual. La misma idea es afirmada por Gómez González (2001) quien afirma que la aparición de las grandes ciudades proporciona interacción en el anonimato, Gómez (2001) rescata la idea de la comunicación no verbal que es usado para la identificación en el entorno cotidiano. Una parte importante de la vida de Adonis García, personaje principal de la novela de Zapata, es su trabajo en la prostitución. Este trabajo es ejercido principalmente en la colonia Roma y en Zona Rosa, como lo señalan Sánchez y López (1997), los lugares de socialización homosexual tienen una fuerte asociación con la prostitución. Es decir, están contiguos dentro de la trama urbana. Esta relación aún es observable. Sin embargo, la prostitución masculina, para el caso de la ciudad de México ha preferido lugares menos llamativos pero que, aún así, son conocidos en la trama de la ciudad. Sin embargo, por su no evidencia visual, no se asocian con el deseo homosexual. De la misma forma, el tipo de personas que asistan a unos u otros lugares va a ser diferente (Sánchez y López, 1997). Como lo destaca Zapata, un potencial grupo dentro de los clientes de los trabajadores sexuales son hombres que no aceptaron su sexualidad y que llevan una aparente vida heterosexual. Los estudios acerca del trabajo sexual masculino que se han hecho en México y que sirven para sustentar el enunciado anterior son los de Alcalá Escamilla (2009) y Álvarez Juárez (2009). Aquí se hace énfasis en la doble personalidad de quienes contratan este servicio, justo como lo menciona Zapata en su obra. Esta doble personalidad ha hecho visible al grupo de hombres que tienen sexo con otros hombres (HSH) y que buscan pasar inadvertidos en la sociedad (Gómez González, 2001) y que, acuden a lugares de homosocialización menos visibles (Sánchez y López, 2011; Sánchez, sin publicar). 9


Los espacios de homosocialización en la ciudad de México fueron posibles debido a la gran concentración de personas que hay y a la supuesta condición de anonimato que se tiene en una ciudad tan grande. Esto es a lo que Camagni (sin año) llama Principio de Sinergía, en el cual afirma que la existencia de bienes y servicios van a estar en función de la demanda que haya de ellos. No obstante, y tras extrapolar esta idea, los espacios de homosocialización van a requerir de el anonimato. Esta característica se va a conseguir cuando los lugares estén invisibles dentro la trama urbana de la ciudad, y que no estén cercanos a los domicilios de las personas. De esta forma, las personas van a cubrir grandes distancias paras evitar ser ‘descubiertas’. Así, uno de los lugares más comunes que Zapata describe son los restaurantes de la cadena Sanborn’s y VIPS, que aparecen en el estudio de Sánchez y López (1997) y el de Laguarda (2012), así como el de Sánchez Suárez (2004) como importantes lugares de homosocialización. El espacio social se convierte en factor indispensable para la formación de redes sociales (Gómez Gonzáles, 2001), para la Ciudad de México, este espacio es principalmente la Colonia Juárez, Zona Rosa, Colonia Roma y Colonia Condesa (Sánchez y López, 1997; Diez, 2010; Laguarda, 2012) La homosexualidad va a importar, para Focault, en el hecho de cómo se expresa en una sociedad (Tasmin, 1999). Bajo ese precepto, se tiene que hacer visible en la ciudad para que sea considerada, pero no en todos los lugares va a tener la misma visibilidad. Puede haber lugares en los que la visibilidad de la homosexualidad sea abierta y algunos otros en los que la visibilidad sea para las personas que asisten a ellos que saben de su existencia. Estos espacios de interacción (Gómez, 2001) presentan un símil con los queer spaces que Brent-Ingram (1997) describe de la siguiente manera: Queer space enables people with marginalized sexualities and identities to survive and to gradually expand their influence and opportunities to live fully. Queer space is in a large part the function of wishful thinkings or desires that become solidified: a solution of the reading of space where querness, at a few brief points and for some fleeting, dominates the (heterocentric) norm, the dominant social narrative of the landscape. Son lugares donde es posible, aunque sea momentáneamente, romper las reglas heterosexuales que la sociedad ha impuesto. Los espacios entonces están construidos por las relaciones simbólicas que se dan en ellos (Gómez González, 2000 citando a Sergi Valera, 2000). 10


Esta misma concepción del espacio como algo que es construido socialmente es en la que Harvey (1973) va a basarse para su clasificación. De esa clasificación se puede entender a este espacio como relativo y que él lo define como el producto de la relación de los objetos que existen en cierto espacio.

Conclusiones Abordar la homosexualidad en México, desde una perspectiva histórica nos permite entender el desarrollo de este movimiento a través de los años que han pasado desde aquel 1978 donde por primera vez en México un contingente gay, el FAHR, se hizo visible. Nos permite también relacionar los hechos culturales más importantes que se suscitaron en México durante este periodo de cambios en la sociedad que, sin duda, han sido sus estructuradores y moldeadores. La intención de rescatar El Vampiro de la colonia Roma es para evidenciar que el movimiento se estaba consolidando, al punto de poder difundir escritos que eran producidos dentro de la comunidad misma y que relataban la vida de los gays mexicanos en ese momento. En esta novela, la vida de un personaje clasemediero es el reflejo de la sociedad gay de esos años. Esto también es una crítica pues no se ocupó de retratar la verdadera situación de los gays mexicanos con situaciones de pobreza, marginalidad, humillaciones públicas, por ejemplo. No obstante, el sólo hecho de contar la vida de un hombre gay es un gran logro, y más lo es el hecho de que pueda haber sido difundido ampliamente y que no haya sido censurado. Una vez más, la intención de rescatar la geografía y espacialidad de los lugares de homosocialización es para evidenciar el sustento físico que los movimientos deben de tener, así como para entender la importancia de éstos en la actual geografía de la ciudad.

11


Bibliografía Alcalá Escamilla, Brenda. (2009) Dinámica territorial del turismo sexual masculinomasculino en Acapulco, Guerrero Facultad de Filosofía y Letras, UNAM. D.F., México. Tesis de Licenciatura Álvarez Juárez, Thania Sttephanni. (2009) Dinámica espacial del turismo sexual masculino en Cancún. Facultad de Filosofía y Letras, UNAM. D.F., México. Tesis de Licenciatura Brenna, Jorge. (2012). “Espacio y territorio. Una Mirada sociológica”. En Explorando territorios. Ma. Eugenia Reyes y Álvaro López López (coordinadores) México: UAM, pp. 81-103. Brent-Ingram, G., et al, “Lost in Space: Queer Theory and Community Activism at the Fin-de-Millénaire”. en Queers in Space. Communities, Public

Places and

Sites of Resistance, Seattle, Bay Press, 1997, pp 3- 16. Camagni, Roberto (sin año) Economía Urbana. Díez, Jordi. (2010) “El movimiento lésbico-gay, 1978-2010” en Los grandes Problemas de México, tomo VIII Relaciones de Género. El Colegio de

México, México.

Eribón, D. “Teoría queer: somos raritos, aquí estamos” en Letra S. Suplemento

de

La Jornada, Ciudad de México, 2 de octubre de 2003. Gómez González, Óscar (2001). Espacios de interacción y batalla de las identidades gay masculinas en la Ciudad de México. Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, UNAM. D.F, México. Tesis de Licenciatura. pp 122. Harvey, David. (1998). Urbanismo y desigualdad social. México: Siglo XXI, pp 1-11. Hobsbawm, Eric. (2004). Historia del Siglo XX 1914-1991. Crítica. Barcelona, España. pp 612. Laguarda, Rodrigo. (2004) “La construcción del deseo”. Ciudades 62. Red Nacional de Investigación Urbana. Ciudad de México. México. pp. 43-51.

12


----------------------- (2011) La calle de Amberes: Gay street de la Ciudad de México. Colección debate y reflexión. Instituto de Investigaciones Dr. José María Luis Mora, UNAM. D.F., México. ----------------------- (2008) ¡Tenemos un mundo por ganar! Visiones militantes de las homosexualidades masculinas en la Ciudad de México. Historia y Grafía, núm. 31, 2008, pp. 133-161. Departamento de Historia. D.F., México. Monsiváis, Carlos. (2001) La gran redada. Publicado en el sumplemento Letras en La Jornada. 8 de noviembre de 2001. Sánchez, A., Turismo y territorialidad de “clandestinogay.com-

México’:

apetencia sexual en lugares secretos. (Aún no publicado). Sánchez, Á. y López, Á. “Gay-Male Places in Mexico city: a Geographical Interpretation” en Queers in Space. Communities, Public

Places and Sites of

Resistance, Seattle, Bay Press, 1997, pp. 197-212. Sánchez, E,. (2004) Lugares gay de la Ciudad de México. Facultad de Filosofía y Letras, UNAM. D.F., México. Tesis de Maestría. -------- (2004) Territorialidad y homosexualidad. En Ciudades 62. Red Nacional de Investigación Urbana. Ciudad de México. México. Pp.56-61. Spargo, Tasmin. (1999). Postmodern Encounters. Focault and Queer Theory. Icon Books, UK. pp 75. Zapata, Luis. (1978). El vampiro de la colonia Roma. De Bolsillo. 177 pp. Sexta reimpresión, enero de 2012. D.F., México. http://www.jornada.unam.mx/2011/10/09/opinion/a04a1cul

13


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.