DJ MAG ES 032

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estas pequeñas caseteras Tomy, como caseteras para niños, eran marrones, hechos para niños de cinco años. “Yo siempre quise tener uno, pero mis padres se negaron a comprármelo porque la calidad de sonido era un asco. Decían que no quería que experimentara la música desde algo que sonaba a mierda, porque la música no va de eso. Creo que fui afortunado de que tuviesen esos valores, y aún ahora esa norma continúa. Todo el mundo quiere escuchar música a la mitad de bits por minuto y consumirla como comida rápida. Jonson charla rápidamente, como si quisiera expresar todas sus ideas a la vez, en cuanto empezamos a hablar de la música que más se vende. Nos cuenta que ya ni si quiera puede escuchar la radio, que la música pop y la EDM, por lo que él tiene entendido, hoy en día son

lo mismo. Afirma que esto se debe a todos los plug-ins que la gente usa, el Pop suena y se siente casi igual que todo este dance. Es todo súper-comprimido, súperalto, súper-abrasivo. En vez de tener bonitos y cálidos sintetizadores, todo es súper-brillante, los filtros son abiertos y todo es gritado. Con el EDM extendido tanto en los clubes estadounidenses como en su top de ventas, es realmente difícil evitar los gritos, pero Jonson ve beneficios más allá de esta influencia. Nos cuenta que no tiene ningún problema si a la gente le gusta este tipo de sonidos, porque esto quiere decir que habrá un enorme público que escarbará al rededor, profundamente y encontrará el verdadero oro debajo, encontrarán sus propios gustos, sobre todo cuando se den cuenta de que no pueden hacer del éxtasis y el speed su vida. Deberían querer escuchar música que pudiesen disfrutar sin esas cosas.

EL PRINCIPIO De vuelta al comienzo, aunque a muchos productores les encante decir que estaban haciendo lo mismo,

Jonson estaba metiéndose enteramente en el lenguaje MIDI a la tierna edad de nueve años. Queriendo quitarle importancia a este hecho, él dice que de ninguna manera era equipo profesional, siendo algo tan básico y con tantas limitaciones era perfecto para que un niño de nueve años aprendiese. Su padre es un multiinstrumentista autodidacta y su madre y ese lado de la familia son aficionados a la música clásica. Crecieron con un clavicémbalo en casa, Mathew incluso cree no haber visto otro desde entonces. Su padre, que ahora es vendedor de guitarras y músico en Nueva Zelanda, toca unos 20 instrumentos - tan bien como la guitarra, cosas basadas en el folk, ligeramente oscuro como el dulcémele y la flauta irlandesa. Su padre le educó en todo, desde la leyenda del blues Robert Johnson hasta

y otra y otra vez durante horas mientras ellos escribían era realmente molesto. A él tampoco le habría gustado escucharlo y afirma que debió ser de locos.

folk-rock británico, Steeleye Span. Cuando tenía siete años, su madre y su padre se sentaron con él y le dijeron que quizá, en vez de sacar todas las cazuelas del armario todos los días y tocar la batería con unas baquetas, le gustaría unirse a la banda, así que eso fue lo que hizo, dos años después fue lo mismo con clases de piano, aún se considera increíblemente afortunado por lo mucho que le alentaron con sus inicios en la música. Aunque eso no quiere decir que fuesen comprensivos con los sonidos que salían del sótano en Victoria, Columbia Británica, donde monté lo que podría llamarse mi primer “estudio”. Sus padres le decían que lo detestaban y que les volvía locos. Él volvía del colegio, el equipo seguía ahí, así que él pulsaba grabar en el reproductor y empezaba a crear música. La primera vez que tuvo el equipo pasaban como dos horas, mientras su madre le gritaba que se pusiera los cascos, después pasaron a ser cinco minutos, porque tras seis años se les acabó la paciencia. Escuchar a alguien tocar el mismo loop una

mezclando esta música como Bell Biv Devoe con un piano. Estaba obsesionado con todo eso, como Chaka Khan, todo de ’Breakdance the Movie’, él lo intentaba repetir con su sintetizador. A pesar de su habilidad, nunca estuvo interesado en el mundo académico, en realidad el colegio no le interesaba lo mas mínimo. Tal era el apoyo de sus padres para la música que invirtieron todo el dinero que habían ahorrado durante 15 años para que Mathew fuese a la universidad y en vez de para eso, se lo gastaron en surtirle con equipo electrónico. Él les dijo que no quería ir a la universidad y que lo mejor para él sería que le comprasen un ordenador con Sound Forge y Cubase, y ellos dijeron que sí, aún tantos años después Mathew sigue sin creérselo del todo y afirma que eso si es amor. Jonson trabajaba de socorrista durante el día y pinchaba por la noche cerca de Victoria, como residente techno en un club y de drum & bass en otro. Cuando un accidente en una piscina le dejó KO, dejó el trabajo y le dieron una compensación laboral

PÉeTANDOLO La música que estaba haciendo por aquel entonces tenía algo que ver con el breakdance. Había escuchado ‘Rockit’ de Herbie Hancock en la tele y le dejó paralizado, pero después se fue y no había forma de saber que había pasado. Así que intentó hacerlo él mismo. Después de haberlo escuchado en la tele y quedarse alucinado pensando en ¿qué ha sido eso? Se iba a su secuenciador e intentaba que sonara lo mismo, esa era la única forma que tenía de escuchar las canciones. También intentaba copiar el hip-hop que escuchaba en MTV. Para él era como si estuviese

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