Desde la perspectiva salesiana, este año 2013 será el año de la Pedagogía de Don Bosco. Precisamente el Aguinaldo ofrecido por el Rector Mayor a la Familia Salesiana nos pone en ese horizonte: Como Don Bosco educador, ofrezcamos a los jóvenes el Evangelio de la alegría mediante la pedagogía de la bondad. Es un año que tiene como finalidad acercarse a Don Bosco educador buscando profundizar y actualizar el Sistema Preventivo. En esa línea se señalan tareas desafiantes como: El relanzamiento del “buen cristiano y honesto ciudadano”; El volver a los jóvenes desde una mayor cualificación pedagógica y la superación de un paternalismo educativo ofreciendo a los jóvenes el encuentro con religiosos salesianos ricos en humanidad y llenos de la gracia de Jesucristo. Por otra parte, ya en el contexto de nuestro país, este año tiene una especial importancia dado que tendremos elecciones presidenciales. Como educadores necesitamos comprender pastoralmente los tiempos que vivimos para evitar caer en las tendencias políticas polarizantes de hoy en día. Desde un discernimiento personal y comunitario tenemos la tarea de acompañar a nuestros destinatarios en las decisiones a tomarse. Finalmente, a nivel inspectorial el año 2013 se dibuja como un tiempo para consolidar y, a la vez, cerrar procesos desatados a partir del Ca-
pítulo General 26. En ese sentido el próximo Capítulo Inspectorial (abril 2013) será un tiempo muy oportuno para evaluar el camino recorrido y, al mismo tiempo, proyectar la Inspectoría hacia las grandes líneas que serán definidas por el próximo Capítulo General 27 de la Congregación. Por tanto, es un año de intenso trabajo y de renovación de esfuerzos. En esa línea de consolidación creo oportuno motivar para darle especial impulso a algunos esfuerzos que consideramos estratégicos y que consta tanto en el POI como en la planificación inspectorial para este año, obviamente sin abandonar lo que ya se viene haciendo. Por ejemplo: • La reorganización, acompañamiento y formación del Movimiento Juvenil Salesiano.
• La estructuración de equipos,
elaboración de propuestas concretas, formación de personal en función de una animación vocacional más consistente. En esta línea nos corresponde consolidar los aspirantados.
• El acompañamiento y fortale-
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cimiento de los Oratorios y las Parroquias salesianas como espacios claves de evangelización y compromiso de los jóvenes (el mayor número de voluntarios/ as provienen de los Oratorios). El desarrollo más integral y articulado de las diversas y ricas ENERO 2013
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