LA IGLESIA RESTAURADA
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John Taylor precedió la caravana al valle y envió dos expediciones de auxilio con yuntas y provisiones; éstas se encontraron con la caravana en el camino y condujeron a Salt Lake City a los santos emigrantes que formaban parte de la misma. La compañía principal llegó a fines de noviembre. La maquinaria se envió primero a Provo, conduciéndola después a Salt Lake City. Parte se colocó en la esquina noreste de la Manzana del Templo, donde se usó por un corto tiempo produciendo melaza. La planta entera se instaló finalmente a 6 kilómetros al sureste de la ciudad, y su ubicación dio nombre al lugar, Sugar House (Casa del azúcar). El primer intento de producir azúcar fue otro desaliento, las semillas de remolacha traídas desde Francia con la maquinaria, se sembraron en las húmedas tierras bajas. Cuando se cosecharon y se molieron, se encontró que el jugo estaba lleno de minerales y era demasiado oscuro. El señor Moílenhauer, un experto fabricante de azúcar a quien habían inducido a emigrar a Utah, vio la condición del jugo y buscó los filtros que se usarían para aclarar eljarabe; no h a b í a n i n g u n o . La compañía francesa que había redactado las especificaciones para las plantas había omitido las "retortas". Por un tiempo pareció que la empresa estaba destinada al fracaso. El señor Moílenhauer y el señor De la Mare improvisaron algunos de la quema de huesos, y con el carbón animal aclararon el jarabe "hasta que estuvo tan claro como el cristal y nos satisfizo", escribe De la Mare, "y se pudo hacer el azúcar y todo lo que se necesitaba era abundancia de material aclarador" 9 . Para esa fecha la compañía estaba tan comprometida y sin medios para pagar sus deudas, que la planta entera fue entregada a la Iglesia, previo acuerdo de que ésta se haría cargo de las deudas. Más tarde la planta se usó para producir jarabe, pero no azúcar. Sin embargo la empresa no fracasó totalmente, demostrando que la remolacha podía producirse en Utah y llegó a ser, más tarde, el inicio del establecimiento de una gran industria. La historia ilustra el valor temerario de los primeros santos en empresas indus-
triales1 °. Educación Los emigrantes, al trasladarse a un nuevo país siempre sufrían por un tiempo un cierto retraso en la educación. La dura lucha por establecerse y la falta total de escuelas y facilidades escolares retardaban la educación de su juventud; y el caso de los santos no fue una excepción. Sin embargo, los esfuerzos heroicos de esta gente aislada por evitar una disminución en el aprendizaje y por promover el entrenamiento de sus jóvenes, tendieron un puente sobre la brecha y facilitaron el camino al espléndido sistema educativo actual. Cuando empezaron los preparativos para el gran éxodo hacia el oeste en Nauvoo en el invierno de 1845-46 comenzó a considerarse la futura educación de la juventud de la Iglesia. Los santos del este que navegaron hacia California en el barco Brooklin llevaron consigo gran cantidad de libros escolares sobre diferentes temas, que se habían reunido bajo instrucciones de Brigham Young. En Nauvoo, el Consejo de los Doce nombró a W.W. Phelps, un entusiasta promotor de la educación, para que preparara y coleccionara los libros de texto que se llevarían al nuevo lugar de reunión, para la educación de la juventud. Algunos de estos libros coleccionados por Phelps fueron usados en las escuelas en Winter Quarters durante la última parte del invierno de 1846-47. En diciembre de 1847, se envió desde Winter Quarters una "Epístola General" a los santos de todo el mundo. En ella leemos: "Es deseable que todos los santos aprovechen toda oportunidad que tengan para obtener por lo menos una copia de cada tratado valioso sobre la educación; cada libro, mapa, carta o diagrama que pueda contener material interesante, útil y atractivo, y que atraiga la atención de los niños a fin de estimular su gusto por la lectura; y también cada escrito histórico, matemático, filosófico, geográfico, geológico, astronómico, científico, práctico y toda variedad útil e interesante para presentar al Archivador General de la Iglesia cuando lleguen a su destino, de ios cuales pueda sacarse material importante e interesante con que compilar las obras de más valor de toda ciencia y tema, para beneficio de la generación que está creciendo" 1 l .
Estas sugerencias fueron seguidas por los santos emigrantes; como resultado, se abrió