poner fin a la politización que caracteriza a las agencias correccionales hoy día. En nuestras cárceles, habrá igual acceso a la rehabilitación pero no toleraremos el contrabando ni mucho menos los privilegios ilegales que algunos confinados hoy disfrutan, mientras otros viven en condiciones infrahumanas.
7.2
Estableceremos la participación en programas de educación formal primaria y secundaria como uno de los requisitos de rehabilitación de los confinados y de las personas en libertad condicional.
7.3
Estableceremos un programa de amplia cobertura para la educación vocacional en centros penitenciarios.
7.4
Fomentaremos programas de educación universitaria para que las personas sentenciadas por la comisión de un delito puedan reintegrarse a la vida en sociedad.
7.5
Ampliaremos la cobertura de los programas de trabajo para toda la población penal que alcancen los niveles de clasificación de seguridad mediana y mínima.
7.6
Promoveremos la ampliación del uso de grillete electrónico para personas que, aunque no califiquen para libertad bajo palabra, demuestren estar rehabilitadas y listas para incorporarse a la fuerza laboral fuera de los centros penales.
7.7
Estableceremos y patrocinaremos la Oficina de Ayuda al Exconfinado, para que sirva de enlace entre el confinado y los posibles patronos en la libre comunidad, entre otros servicios. Si la espiral en criminalidad es achacable, en gran medida, a deficiencias educativas, altos niveles de deserción, poca capacitación diestra, narco-dependencias y otras condiciones de salud no atendidas; el Estado debe enfatizar en una rehabilitación que prepare al confinado para el mercado laboral habiendo atendido esos condicionantes.
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::PROTEGER A PUERTO RICO::