l ia ec sp E AÑO XXXIII NÚM. 545
NOVIEMBRE 2012
Fundador: D. Luís Valpuesta Director: José Luís Osorno Dep. Legal SE - 1143
FEDERACIÓN REGIONAL DE ANTIGUOS ALUMNOS Y ANTIGUAS ALUMNAS DE DON BOSCO «MARÍA AUXILIADORA» DE SEVILLA VISITA DE DON BOSCO (19 DE SEPTIEMBRE/13 DE OCTUBRE DE 2012) Continuando con su largo peregrinar por todo el mundo salesiano, Don Bosco se hizo presente en nuestra Inspectoría, en nuestra Federación Regional, en nuestras casas, para vivir entrañables momentos de gozo junto a niños, jóvenes y menos jóvenes que solícitos acudieron a la cita de tan feliz acontecimiento. Han sido veinticinco días de intensas vivencias en cada una de las poblaciones visitadas por la urna con las reliquias de nuestro fundador. La alegría de los más jóvenes, con sus vítores, aplausos y cánticos, se ha unido al respeto y gratitud de todos los que de una forma u otra han frecuentado su gran Obra, para que en común unión celebrar tan histórica visita. Familia Salesiana en Jesús Obrero (Sevilla) Esta visita que forma parte del programa de actos del próximo Bicentenario del nacimiento de Don Bosco, ha coincidido en nuestra tierra con la apertura del año de la Fe. San Juan Bosco fue el mejor de los testimonios de fe que hemos vivido en nuestra Familia Salesiana. Por ello, no sólo debe ser un hecho histórico dentro de nuestro mundo salesiano, sino que debe ser un compromiso que nos obligue como cristianos a la evangelización, siguiendo las directrices de S. S. el Papa, Benedicto XVI. Recordemos en estos momentos el sueño de las dos columnas, en el que Don Bosco nos indica que debemos obediencia al Sumo Pontífice. 1
ENCUENTRO CON DON BOSCO
Cรกdiz
Cรณrdoba
La Orotava
Mรกlaga
Granada
Sevilla Trinidad 2
DON BOSCO ENTRE NOSOTROS
Algeciras
Jerez de la Frontera
Montilla
Pozoblanco
La Cuesta
Las Palmas 3
¡TODOS CON DON BOSCO!
Palma del Río
Sevilla Triana
Úbeda
Utrera
DEL TESTAMENTO ESPIRITUAL DE DON BOSCO “Mis queridos y amados hijos en Jesucristo: Antes de partir para mi eternidad, debo cumplir con ustedes algunos deberes y satisfacer así un vivo deseo de mi corazón. Ante todo, les agradezco, con el más vivo afecto de mi corazón, la obediencia que me han profesado y cuanto han trabajado para sostener y propagar nuestra Congregación. Yo los dejo aquí abajo, pero sólo por un poco de tiempo. Espero que la infinita misericordia de Dios haga que nos podamos encontrar todos un día en la feliz eternidad. Allí los espero. Les recomiendo que no lloren mi muerte. Es una deuda que todos tenemos que pagar, pero después nos serán ampliamente recompensados todos los sufrimientos soportados por amor a nuestro buen Maestro Jesús. En lugar de llorar, hagan firmes y eficaces propósitos para permanecer seguros en la vocación hasta la muerte. Vigilen y procuren que ni el amor al mundo, ni el afecto a los parientes, ni el deseo de una vida más cómoda los induzcan al gran error de profanar los sagrados votos y traicionar así la profesión religiosa con la que nos hemos consagrado a Dios. Si me han amado en el pasado, continúen amándome en el futuro con la exacta observancia de nuestras Constituciones. Su primer Rector ha muerto. Pero nuestro verdadero Superior, Cristo Jesús, no morirá. Él será siempre nuestro Maestro, nuestro guía, nuestro modelo; pero recuerden que, a su tiempo, Él mismo será nuestro juez y recompensará nuestra fidelidad en su servicio. Su Rector ha muerto, pero será elegido otro que cuide de ustedes y de su eterna salvación. Óiganlo, ámenlo, obedézcanle, rueguen por él, como lo han hecho por mí. Adiós, queridos hijos, adiós. Yo los espero en el cielo. Allí hablaremos de Dios, de María, Madre y sostén de nuestra Congregación; allí bendeciremos eternamente a nuestra Congregación, la observancia de cuyas Reglas contribuyó poderosa y eficazmente a salvarnos.” 4